Dom 6 Quevedo (Hormiga) s1.03143,w79.47025

Paz Revello, Aduana Tulmen Ecuador


Grupo Hormiga - Santo Domingo de los Colorados (Ecuador)







490k, 7h a 66k/h; max:140
Cabe aclarar que igual me convino que no me hicieran los trámites porque se me hacía de noche y estaba lloviendo. Al día siguiente las cosas mejoraron, ya no era de noche...
Busqué a la señora Paz a las 8 del domingo en lugar de las 9. Me dijo que la fuera a esperar a la aduana. Bajó especialmente los 6km para hacerme el papel a mano porque el sistema central no andaba (y obviamente no iba a ser reparado un fin de semana).
Le agradecí infinitamente (me tendría que haber quedado un día más sino) y partí a las 9am hacia Quito.
El camino de montaña con curvas ya me resultaba familiar de tantos que me tocaron, la variante con lluvia lo hizo más interesante. En algún momento dejó de llover y me saqué el traje de lluvia que es molesto y caluroso.
Quito me pareció una ciudad grande y no tan interesante, como mi pariente no estaba ahí decidí pasarla por alto, y hablando de altura no me convencía el funcionamiento de la moto y revisé las bujías, estaba todo bien, se ve que a 3000m la moto no anda como abajo.
Haciendo caso a un consejo que me dieron, fui hacia Santo Domingo de los Colorados que es en el llano, hacia el pacífico, es más "largo" pero ya no hay camino de montaña y es mucho más rápido.
Bajar de quito fue lo peor que me tocó hasta ahora. Al pasar un peaje (0,20u$ las motos) me puse el traje de lluvia (en realidad es de plástico el traje). El camino se metió literalmente en una nube, todo llovizna,frío, niebla que no dejaba ver más de 20 metros, camino de montaña, angosto y cada tanto con largas colas de autos tratando de pasar algún camión que van más despacio que tortuga coja embarazada.
Yo los pasaba a todos porque la moto es más fina, pero algo estresante, casi no hay lugares para pasar legalmente. La niebla se convirtió en lluvia a medida que bajaba. Una vez abajo se acabó todo, caminos rectos, clima agradable, valió la pena salir de la altura.
En santo Domingo me crucé con un grupo de motociclistas: "Hormiga" llevaban en las remeras. Serían unos veinte, saludándolos les comento que vengo de USA y voy para Argentina, me dicen de parar para que les cuente un poco más.
Me hicieron miembro por la odisea que emprendí, ellos iban hacia quevedo (100km más al sur), yo quería llegar a Guayaquil pero eso durante el día ya no era posible, ni conveniente porque el camino más corto hacia perú no pasa por ahí.
Considerando que eran las 16 y no había comido nada desde el desayuno (yogur y un pan) los acompañé a un "shopping" y comí ahí mientras les contaba anécdotas del viaje.
Fuimos todos en caravana hacia Quevedo, me sentí muy feliz después de tantos días en solitario de pertenecer a una banda grande de motociclistas en los que si le pasa algo a alguno todos lo ayudan.
Me invitaron a cenar y me pagaron un albergue. Otro se ofreció a lavarme la ropa sucia. Una habitación con aire acondicionado y agua caliente, no lo podía creer!
Al día siguiente, el jefe del grupo (javier, alias "abuelo") que tiene un taller de motos (me recuerda al jefe de "Vándalos" en argentina que también es el capo y tiene taller. Me cambió el aceite del Cardán, el aceite del motor y agregó un poco de líquido refrigerante y ajustó el freno trasero que frenaba muy poco.
Con todo en condiciones, y casi con lágrimas de agradecimiento me fui de quevedo, no sé si ya lo dije, pero lo peor del viaje son las despedidas, espero volver a verlos alguna otra vez, pero siempre los tendré en el corazón.