(isidro - amado)
Salí de guatemala finalmente algo tarde para tratar de despedirme de Leonel que finalmente no pudo venir a tiempo porque estaba con el auto en el taller, así que nos despedimos telefónicamente. El cruce en la frontera fue hinchapelotas como siempre pero al menos para entrar al Salvador no hay que pagar nada por la moto aunque tardé una hora en los trámites. Ahí usan el dólar como moneda. Llegué a lo de Amado Espino, poco antes de la capital, muy amable me dio de cenar y usé un rato su pc para organizarme un poco las estadías subsiguientes. A pesar de lo poco que estuve, bastó para apreciarlo bastante, es un maestro, ofreció dejar la llave y que yo entrara solo sin conocerme. Me contó un poco acerca de su ciudad, que tres o cuatro veces por siglo suele ser semi destruida por algún terremoto. Cosa que en Bs As es algo que no llegamos a comprender.
Al día siguiente partí temprano (9am) para un día interminable...
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